Si no dispones de mucho tiempo o eres nueva en esto, sigue estos sencillos pasos mañana y noche.
1. Limpieza
Este paso es fundamental. Elimina las células muertas e impurezas de tu piel con un limpiador adaptado a tu tipo de piel. Este paso también ayuda a activar la circulación.
2. Tónico
Equillibra el ph natural de tu piel, minimiza los poros y aporta un extra de hidratación. Tu piel está lista para una mejor absorción de la crema o loción.
3. Crema o loción
Hidrata la piel de tu rostro aplicando crema o loción.
4. Protección solar
Es imprescindible proteger tu piel ante los efectos del sol.
1. Doble limpieza
Aunque no vayas maquillada, lleva a cabo ambos pasos.
• Desmaquillador o aceite limpiador
Retira el maquillaje, cualquier resto de cremas y el sebo de tu piel con un aceite limpiador en formato bálsamo o aceite.
• Limpiador de base acuosa
Elimina la totalidad de impurezas de la piel. Puedes usar el formato gel o espuma.
2. Tónico
3. Serum o mascarilla hidratante
Aporta un extra de hidratación antes de aplicar la crema final.
4. Crema hidratante
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